LA BOMBA ... DE AGUA

Nuevamente hemos tenido que sufrir la falta de agua en La Junta de los Ríos, aunque afortunadamente no hemos sido los únicos, otras barriadas de Arcos también han sido afectadas. Y Digo afortunadamente solo por el hecho que al haber afectado el corte a más gente, el impacto mediático ha sido mayor y la intervención en buscar soluciones ha sido mayor y también se ha enterado mucha más gente de lo que supone estar en pleno mes de agosto sin gota de agua. Las cosas hay que decirlas por su nombre y esta vez sí que ha respondido correctamente el ayuntamiento y ha gestionado, dentro de las posibilidades, bien la crisis. Lo que reclamamos siempre, que los responsables políticos den la cara cuando surgen problemas, esta vez sí, tanto el Delegado como la concejal correspondiente. Todo lo contrario sucede con Gestagua, que aun no se ha enterado que está al servicio de los ciudadanos y debe avisar de los cortes de agua a todos los vecinos afectados e informar de las previsiones que se derivan para abastecer de agua a todos sus usuarios. Esperemos corrijan esta deficiencia que tienen y sino cuando se tenga que revisar la concesión administrativa, nos encargaremos de recordar lo que no son capaces de hacer. Lo que si que me parece increíble es la actitud despectiva y pasota de los miembros de la Asociación de vecinos ante la inquietud de los vecinos y el malestar que provocaba esta situación. Solo la nueva asociación de la Junta de los Ríos, creada hace poco, hizo gestiones para que las familias que no tuvieran agua y que no dispusieran de bombo para almacenar agua, fuese una cuba, proporcionada por el Ayuntamiento, para abastecerlos hasta que el suministro se restableciera. Creo que también debería haber mas gente que de forma desinteresada trabajase para su barriada, o por lo menos si ostentan un cargo, aunque vecinal, cumplan con sus obligaciones y sino que dejen trabajar a los demás.


Rafael Galván Rodríguez

EL PACTO DEL DIABLO

El resultado de los sondeos para el Gobierno del Ayuntamiento de Arcos publicado días atrás, ya ha hecho temblar las piernas a más de uno/una. Cuando ésta legislatura de cuatro años está a punto de finalizar, en estos últimos meses hay quien quiera hacer lo que no ha sido capaz de hacer en tres años y aún es capaz de decir que prefiere un pacto en vez de decir que se va a su casa y reconocer de una vez por todas su inaptitud constante. Ahora es el momento determinante cuando debe entrar la fuerza y la inteligencia de los grandes partidos que deben imponer, exponer y planificar proyectos ambiciosos para nuestra ciudad y dejar de lado y jubilar a los protagonistas que han demostrado que no sirven y no saben valorar el bien común. La maquinaria de la política debe servir para eso y no para dar premio a quien no se lo merece. Afortunadamente, tenemos personas actualmente situadas en un segundo plano con mucha ambición, conocimiento, experiencia y ganas de luchar para levantar conjuntamente, con insistencia y sin pausa, lo que otros han dejado por los suelos. No hace falta irse muy lejos para saber quien debe encabezar este nuevo proyecto, solo hace falta valorar la gestión realizada de cada uno/una de los miembros del consistorio, y quien tenga una mínima inteligencia sabrá señalar quien debe ser la persona que lidere un nuevo proyecto.
Siempre nos queda la esperanza que entre todos, con nuestros votos, pongamos en su sitio a muchos de los que se han dedicado a la política desprestigiándola con sus personalismos y trifulcas de patio de colegio en vez de trabajar para la ciudad de Arcos.

Rafael Galván Rodríguez